Luego de seis años de ocupación irregular, el Instituto Nacional de Migración (INM) desmanteló ayer el retén que mantenía en el sur de Veracruz en un terreno privado dentro del rancho El Peñón, sin haber pagado un solo peso por su uso.  

Antes de saldar la deuda millonaria que implicaba su estancia en el sitio, el INM, junto con elementos de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano, retiró toda la infraestructura utilizada para las presuntas revisiones migratorias.  

El propietario del predio había advertido que tomaría acciones legales, incluyendo cercar el terreno y exigir el pago de renta por los años de ocupación.  

Tras el retiro de las autoridades, en el sitio solo quedaron algunas llantas y los aparatos de rayos gama, utilizados en ocasiones para la inspección de vehículos.