Martes 23 de abril de 2024

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Nuevo zar de la basura jarocha

VERACRUZ, VER.-: Pese a que el contrato fue firmado en enero del 2018, el gobierno municipal se mostró poco transparente con este contrato. / CORTESÍA

“El Chino Villareal”, pasó a ser el nuevo proveedor del servicio de limpia pública; le pagarán 60 millones 480 mil pesos producto de recursos municipales

● EL ESTADO | IGNACIO CARVAJAL/ BLOG EXPEDIENTE MX | VERACRUZ, VER.- | 19 de Noviembre de 2018

El nuevo “zar de la basura" se llama Luis Fernando Villareal Ortiz, y es un joven empresario que vive en la ciudad de México, oriundo de Saltillo, Coahuila, quien ha pasado los últimos años de su vida haciendo negocio y manejando grandes cantidades de dinero por medio de sociedades financieras de objetivo múltiple (SOFON).

Villareal Ortiz, conocido en el mundo de los negocios como “El Chino Villareal”, pasó a ser el nuevo proveedor del servicio de limpia pública del puerto jarocho desde el pasado 2 de enero del 2018, pero arrastra en su pasado una serie de señalamientos por fraude.

Villareal Ortiz representa a la empresa Gestiona Capital Soluciones S.A.P.I de C.V SOFOM ENR, cuyas oficinas se ubican en Homero 823 de la colonia Polanco, delegación Miguel Hidalgo, en la Ciudad de México, y firmó contrato con Veracruz puerto el 2 de enero de 2018.

Se trata del contrato AD-MVER-001-18-PS-01 con el municipio, representado por el alcalde Fernando Yunes Márquez, y la síndico, Aida Lamadrid, para hacerse cargo de la recolección de la basura en Veracruz y su confinamiento hasta diciembre del 2018 y por el que se le pagaría hasta 60 millones 480 mil pesos producto de recursos municipales.

Ese importe de recursos se otorgó a esta empresa por adjudicación directa, por “excepción de la Ley NO. AD-PS-MVER-001-18.

Es decir, un subcomité de adquisiciones fue el encargado de otorgar esta suma millonaria a una empresa que no es de Veracruz, pese a que la gran demanda de los empresarios locales es generar derrama y empleos con los locales.

Sin embargo, pese a que fue la misma fecha de la firma del contrato, ese 2 de enero, el alcalde panista dijo a la prensa que no conocía el nombre de la empresa que había sido elegida para prestar el servicio tras la salida de Servilipuver.

Ahí explicó que no se había hecho licitación alguna, pues así lo marca la ley, al ser un servicio básico.

También que se estaban presentando 25 de una flota de 50 nuevos camiones recolectores de la nueva empresa que ya iban a entrar en operación. Al dar un balance, el exsenador de la república indicó que era la mejor opción para el ayuntamiento ya que comprarlos iba a salir más caro.

Lo que no se contó ese día sin embargo es la historia inmediata del nuevo zar de los desechos jarochos.

Si se busca en la red datos sobre la empresa Gestiona Capital Soluciones S.A.P.I de C.V SOFOM ENR, no se encuentran referencias que confirmen su experiencia con algunos otros gobiernos o ciudades en donde hayan manejado los desechos.

Eso sí, los datos de su director y representante, Luis Fernando Villareal Ortiz, son amplios.

Por ejemplo, además de director de esa firma financiera, cuenta con licenciatura en Administración Financiera, Economía y Finanzas por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM).

Ha sido analista financiero de la sección de negocios de Multimedios Televisión en Saltillo, analistas de planeación financiera en Water Capital, en la ciudad de México, director de la SOFOM, Socio fundador de Blu Nord Sapi de CV, director de la arrendadora Aura Holding y de 2016 a la fecha, Director General en Gestiona Capital Soluciones.

Lo que no incluye en su CV El Chino Luis Fernando Villareal Ortiz es su paso por la financiera SEFISE S.A de C.V que en abril del 2014 fue denunciada ante la PGR por docenas de inversionistas que resultaron defraudados en el norte del país, especialmente en Saltillo.

En ese año, según reseña el diario El Zócalo, se dio a conocer el fraude millonario estimado en unos 200 millones de pesos causado por la empresa que en Saltillo era representada por El Chino Villareal, pues la misma entró en un crisis financiera.

SEFISE fue una financiera mexicana fundada en 2007 y con presencia en 4 estados, que ofrecía créditos personales a empleados gubernamentales vía descuento por nómina, créditos para capital de trabajo con garantías hipotecarias o prendarias, y créditos a grupos de personas físicas con proyectos de fomento rural.

SEFISE entró en proceso de restructura financiera a finales del 2013 derivado del incumplimiento de pago de varias dependencias de gobierno, principalmente de los estados de Guerrero y Morelos, ocasionaron que SEFISE cesara sus operaciones después de varias denuncias en la PGR.

Dice El Zócalo en su edición del cuatro de abril del 2014:
“No sólo los ladrones de autos, viviendas y celulares operan en Saltillo, también los pillos de cuello blanco que se dedican a defraudar a empresarios y personas de altos ingresos. El más claro ejemplo es el de la empresa fantasma SEFISE S.A. de C.V., que estafó a decenas de coahuilenses.

“El abogado Xavier Olea Trueheart destapó el mega fraude en que incurrió la financiera en perjuicio de más de 70 inversionistas –incluidos algunos saltillenses– que denunciaron ante la Procuraduría General de la República, aunque bastó que se ventilara en los medios de comunicación para que la empresa desapareciera de Saltillo.

“A menos de seis meses de haber abierto sus puertas, SEFISE dejó de atender a sus inversionistas en la capital del estado y hasta retiró la razón social bajo la cual operó durante algunas semanas, consiguiendo amarrar millonarias inversiones, bajo la promesa de estratosféricos e irreales rendimientos que finalmente no entregó, según lo declarado por el abogado del Despacho Olea y Olea que representa a los defraudados.

“Y resulta, que la empresa era operada por Luis Fernando Villarreal Ortiz, quien fungía como director de administración y finanzas en SEFISE del Norte, misma empresa que se promocionaba en internet como ‘una sociedad Financiera de Objeto Múltiple (Sofom), concebida para prestar servicios financieros especializados, brindando acceso a micro y pequeñas empresas, y personas físicas que tienen poco o nulo acceso al sistema bancario’”.

La nota fue integrada por una amplia entrevista, en exclusiva, aportada por el abogado de los defraudados, Xavier Olea Trueheart, quien explicó que la empresa cometió si había actuado con dolo al enganchar a los inversionistas ofreciendo rendimientos que sencillamente eran insuperables, y que al final del día, no se pudieron pagar, y los dueños del dinero no vieron redituado sus recursos.

Entre sus clientes estaba el gobierno de Saltillo de ese entonces, que estaba encabezado por Isidro López Villarreal, quien es señalado por El Zócalo de haber permitido que los financieros de SEFISE se le metieran hasta la cocina con el manejo de la nómina y el predial.
“Alcalde permite que yerno opere nómina municipal”, dice la cabeza de otra nota dada a conocer posteriormente al fraude, y en el bajante: “Arturo Ferrer, ‘El Chino’ Villarreal y socios de SEFISE intervienen en áreas delicadas de la Administración”.

En el cuerpo de la nota explican que El Chino Villareal era allegado a la hija del alcalde.

En otra nota, el mismo diario titula: “No hay ningún problema en manejar efectivo: Villarreal”, en la que dan a conocer un video en donde se escucha al Chino Villareal contar la manera en que capta sumas millonarias de recursos de inversionistas para hacer negocios a gran escala.

El Chino Villareal fue videograbado por un periodista de Zócalo que se hizo pasar por posible inversionista. Tras esa nota, la financiera en cuestión pagó desplegados en los cuales se deslindó de Villareal Ortiz, además, exponen que siempre se comportó “con honestidad y ética profesional”, y que había dejado de trabajar en la misma desde septiembre del 2013.

Sin embargo, tiempo después, la misma empresa que lanzaba elogios en desplegados a su operador financiero, se veía obligada a firmar convenios.

En octubre del 2018, y derivado de las denuncias en la PGR, se dio a conocer que SEFISE había terminado de liquidar de manera anticipada todos los convenios de reestructura que firmaron con sus acreedores derivado de la crisis de liquidez por la que atravesó la financiera en el cuarto trimestre de 2013.

Pese a que el contrato fue firmado en enero del 2018, el gobierno municipal se mostró poco transparente con este contrato.

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