Afortunadamente, existe una nueva técnica en el mercado de la belleza: el lifting de pestañas.

Este método no tiene nada que ver con las extensiones, que desde hace tiempo están de moda. Aunque son efectivas, algunos expertos afirman que terminan por debilitar las pestañas naturales.

El lifting se parece más a un rizado permanente, en el que se utiliza una almohadilla sobre la cual se coloca un químico que las enchina. Sin embargo, el rizo las acorta visualmente.

Por su parte, el levantamiento se realiza con una goma distinta, que se ajusta perfectamente al ojo. Esta permite alargar las pestañas desde la raíz.

A diferencia de otros procedimientos químicos, no daña el vello de la zona, toma 45 minutos y dura varias semanas.

En Europa ya hay lugares que lo realizan, aunque también es posible comprar el kit para hacerlo. En internet tiene un precio de 80 euros.